Inoxcrom 66
El modelo 66 de Inoxcrom tiene nombre propio pero, realmente, es una 55 con un plumín de oro (o simplemente dorado, hacia el final de su producción).
Todas las piezas de la 66, menos el plumín y el marcaje del capuchón, son idénticas a la 55, como demuestra el Catálogo de Partes del Servicio Inoxcrom de 1960. Una posibilidad habría sido llamarla 55/O, tal como ocurrió en otros modelos posteriores, pero por aquel entonces Inoxcrom solo fabricaba los modelos 55 y 60, y había abandonado ya la fabricación del modelo 41, por lo que suponemos prefirió identificar a esta pluma como un modelo diferenciado, para ir creando una imagen de marca con más caché.
El modelo sale al mercado en Marzo de 1960, contratando Inoxcrom publicidad en el periódico La Vanguardia. Como se observa, las virtudes que alega para esta pluma se podrían aplicar igualmente a la 55, salvo el tener plumilla de oro.
En la publicidad siempre se describe al plumín como "de oro", pero sin especificar la ley, aunque hemos encontrado un folleto publicitario en el que se dice explícitamente que es de 14 quilates. Sin embargo, esto fue cierto tan sólo hasta 1970, fecha en que pasaron a ser simplemente dorados (según información proporcionada por un ejecutivo de la marca). Los plumines de oro se fabricaron por la propia Inoxcrom, aunque (según información suministrada por Damiá Onsés, hijo) durante picos de demanda se externalizó parte de su producción a Damiá Onsés (padre) en Barcelona, que era el mayor proveedor de plumines de oro para todos los fabricantes nacionales.
La pluma se distinguía exteriormente de la 55 por una etiqueta muy aparente en el capuchón (ya que su estuche era muy genérico), y por las "marcas de tiza" en el cuerpo.
Dado que en uso la etiqueta y las marcas de tiza desaparecían, la única identificación que quedaba era el grabado del labio del capuchón:
INOXCROM | 66 | INOXCROM SPAIN | |
ORO |
Los colores estándar de la 66 fueron los mismos que los de la 55: Negro, Azul, Granate, Verde y Blanco. Los alimentadores eran indistintamente negros o transparentes.
Su fabricación terminó en 1976.
Como no podía ser menos, la anarquía típica de la marca afectó a este modelo. Se conoce un modelo blanco, con clip dorado, claramente orientada al mercado de Primeras Comuniones, pero inusual en que el clip está dorado.
Sólo se conoce una, propiedad de un coleccionista que posee, además, una 55 análoga; posiblemente ambas fueran prototipos, o parte de una serie corta hecha para medir la demanda.
Otra pluma sorprendente, sobre la que también se duda de si fue un prototipo o una serie corta. En este caso parece lo segundo, pues se conocen varias, aunque muy escasas.
Fuera cual fuera su propósito, esta pluma terminó siendo un ejercicio de diseño. El cuerpo en acero mantiene la forma ojival original, y se adorna en su mitad con unas numerosas, pero ligeras, estrías longitudinales. El final del cuerpo es un inserto en plástico acrílico que, a diferencia de la serie, es truncado. Igualmente hay un inserto acrílico interior que rosca con la boquilla (y que existe en negro y en granate). Finalmente, el tornillo del capuchón que sujeta el clip es de menor diámetro que el estándar y tiene una depresión cónica, semejante al que luego llevarían los modelos 33 y 77.
El bolígrafo Inoxcrom 66 nos reserva otra sorpresa. Al igual que la pluma 55 tuvo su bolígrafo a juego (que aún se produce), y posteriormente lo tendrían las plumas 33 y 77, era de suponer que Inoxcrom sacara un bolígrafo a juego para su entonces mejor pluma.
La sorpresa es que este bolígrafo no solo es idéntico al que luego, y por poco tiempo, se denominaría "77-largo", sino que es desconocido para aquellas personas allegadas a la marca con las que hemos oportunidad de entrevistarnos.
Miguel Huineman.
Julio 2012
Con agradecimiento a quienes han colaborado en la ilustración de este artículo